“Que salga Renán Barrea a decirme en mi cara que no me va a dar una disculpa pública”: madre de José Eduardo
Texto y fotos por Abraham Bote Tun
Con los ojos cristalinos, la señora Dora María Ravelo Echavarría acudió al Palacio del Ayuntamiento de Mérida a exigirle al alcalde Renán Barrera Concha que le ofrezca una disculpa por las violaciones a los derechos humanos que sufrió su hijo: “Ahora tiene la oportunidad de salir y darme la cara y decirme en mi cara que no me va a dar una disculpa pública”, manifestó la mujer.
“Aquí te voy a esperar, Renán Barrera tengo todo el tiempo del mundo para esperar a que bajes a darme mi disculpa pública y a que aceptes la consecuencia de los actos de tus policías”; sentenció.
A un año de la muerte de su hijo, María, junto a un grupo de manifestantes, salió a las calles de Mérida para exigir justicia por la muerte de El Güero, como era conocido. Este jueves 21 de junio, se realizó una marcha en su memoria.
Alrededor de las 6 de la tarde, la mujer se dio cita en el parque de San Cristóbal, ahí la acompañaron varias personas con cartulinas que rezaban diversas leyendas como. “Renán, tu policía no nos cuida” “Renán, mi madre sigue esperando una disculpa pública”, “Justicia para José Eduardo”, “renuncia Renán. Basta de proteger a delincuentes”.
Las y los manifestantes, encabezados por Dora María, quien apenas podía caminar con ayuda de un bastón, partieron del parque, sobre la calle 69, rumbo a las instalaciones del Ayuntamiento de Mérida. En el recorrido gritaron varias consignas: “José Eduardo no murió, el Estado lo mato” “justicia, justicia para el Güero”; señor, señora, no sea indiferente, se matan juventudes en la cara de la gente”, “ya pasaron 365 días sin justicia para José Eduardo”; “Policías corruptos, violadores, asesinos”, la policía no me cuida, me mata”, “Hoy es ella, mañana pueden ser cualquier de ustedes”; entre otras expresiones.

En una primera parada, los participantes de la marcha se detuvieron en las puertas del palacio del gobierno estatal, donde acompañada de unos menores de edad le dijo al gobernador Maurici Vila Dosal. “Estos niños son el futuro de Yucatán ¿qué les espera con esa justicia que ustedes tienen?. Estoy esperando mi justicia. Un año ha transcurrido del ataque de los policías de esta ciudad y todavía no veo la justicia”, manifestó la madre, quien se quebró en llanto.
Le pidió a Vila Dosal que obligue al alcalde a entregar a los culpables de la muerte de su hijo, quien no murió de neumonía, según indicó, sino que fue consecuencia de lo que hicieron los policías . “Si no lo hubiera torturado, violado jamás hubiera ido a un hospital y perder la vida”, enfatizó.
Los y los manifestantes siguieron su camino hasta llegar a palacio municipal, donde pidió ser recibida por Barrera Concha, donde indicó que aunque capacite a su policía, “tendría que cambiarles el corazón y la mentalidad también para que no sigan haciendo los ultrajes que hacen con métodos mal practicados a los detenidos que causan la muerte”.

Por su parte, en un escueto comunicado, el Ayuntamiento de Mérida dijo que no puede aceptar la recomendación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) que determinó que el presidente de Mérida debe ofrecer una disculpa pública y reparación del daño por la tortura y detención ilegal de la que fue víctima José Eduardo, porque “hay impedimento para aceptarlas, ya que aún continúa la investigación”.
“Como gobierno municipal también queremos el total esclarecimiento del caso, por ello se colabora con todas las autoridades. Desde que el Juez de Control y la Fiscalía General de la República emitieron el resultado de su investigación que determina que la Policía Municipal de Mérida no tuvo intervención en este hecho lamentable”; justificó la autoridad municipal.
Aunque señalaron que el municipio cumplió con responder las recomendaciones que emitió la CNDH en donde se presentó evidencia de que se acataron 10 recomendaciones que estaban bajo la responsabilidad de la autoridad municipal.
Desde agosto del año pasado en que se tuvo conocimiento del lamentable hecho ocurrido al joven José R. E., el Ayuntamiento de Mérida ha mantenido su compromiso de colaborar con el detallado proceso de investigación que realizaron las autoridades competentes para ofrecer una respuesta que alivie el dolor de la familia.
Así, las autoridades municipales garantizaron la seguridad de quienes asistieron esta tarde a la marcha convocada por la madre de José E., C. María Ravelo Echevarría, además que se brindó una audiencia con personal calificado para atender las inquietudes sobre este penoso suceso.