Libre Cinema Festival, espacio de resistencia a través del cine
Cumplen 8 años de fomentar cine independiente mexicano en Yucatán
Vamos a “gustar” cine mexicano, campaña de su séptima edición
Por Abraham Bote Tun
Para Fernanda Camacho Bautista y Emmanuel Tatto Pérez, la disciplina, terquedad y tener fe han sido factores fundamentales para que Libre Cinema Festival se consolide como uno de los festivales de cine independiente en el país y la región sureste a través de sus 8 años de existencia.
De acuerdo con sus dos fundadores, Libre es un espacio de resistencia a través del cine, principalmente mexicano. “Ver cine para hacer cine”; el cual se ha caracterizado por exponer películas diversas, que retratan alguna problemática social; desde defensa del territorio, violencia de género, discriminación, miradas hacia los grupos en situación de vulnerabilidad: La lucha de la comunidad LGBT+, entre otras temáticas.
Un festival que inició como un proyecto escolar, hace unos 8 años, este 2022, del 10 al 17 de diciembre, llevará a cabo su séptima edición, teniendo como sedes: la Cineteca del Teatro Armando Manzanero y el Centro Cultural Olimpo.
Fernanda Camacho reflexiona que parte del éxito que ha tenido el proyecto es no quitar el dedo del renglón: acercar el cine mexicano independiente, de autor, con causa, el cual no llega exhibirse en algunas salas comerciales y en plataformas de streaming en Yucatán.
“Ha sido un gran aprendizaje, iniciamos como personas fanáticas del cine y ahora ya vamos avanzando para poder sumar a la sociedad, juventudes, universidades”, indicó la gestora cultural.
Emmanuel Tatto explica que la esencia del festival se centra en la libertad para hacer cine, no se encapsula en un solo tipo, ni metodología. “Hay una libertad para producir y apreciar el cine, tiene esa rebeldía para presentar películas y motivar a hacer cine”, señala el cineasta.
Cine para hacer cine
Algo que igualmente destaca a este festival es que no sólo se exponen películas, sino que ofrecen diversos talleres para los amantes del cine; para que conozcan más de cerca la experiencia; dotar a las personas de herramientas que los impulsen a crear sus propias historias.
Invitan a cineastas que comparten sus conocimientos, experiencias. “Hay una necesidad de formación en Yucatán, no tenemos una escuela de cine, estamos aislados del centro, por eso compartir conocimientos es muy importante para el festival”, indica.
¿Cuál es su fórmula para llegar a esta séptima edición?
“Creernos que podemos hacerlo, que es posible generar este espacio que promueve cine no comercial y tener fe en el proyecto, en que se puede generar este tipo de actividades”, expresó Fernanda.
Emmanuel Tatto complemente: disciplina y terquedad.
Vamos a gustar cine mexicano
“Gustar” es un término muy utilizado en Yucatán, ‘ara referirse a mirar o ver algo. “Vamos a gustar la tele”; “vamos a gustar la novela, la película”; frases que han usado nuestras abuelas, madres y padres.
Por eso, este año, para recalcar que este proyecto surgió Yucatán lanzaron esta campaña para promover su nueva edición. “Unos de los éxitos del festival es que lo hacemos desde nuestros propios contextos, que sea parte de lo que somos y dónde estamos”, reflexiona Fernanda.
A su vez, quieren demostrar que en el sur mexicano también existen estos espacios de resistencia para exhibir cine.
En esta ocasión, proyectarán películas que retratan diversas problemáticas sociales, como el crimen organizado, pero no desde una visión romantizada, sino acercado a la realidad. Por ejemplo, Las plebes y Los débiles, dos películas que hablan sobre jóvenes que están inmersos en agrupaciones criminales.
Sísifos, una película que aborda el problema de las adicciones, a través de las historias de personas que están en anexos, quienes buscaron una alternativa para salir de este mal pues son conscientes de la violencia que ocasionan a sus familias.
La revuelta habla de las mujeres que crearon la primera revista feminista en el país, La fábrica de pandemias, que retrata las afectaciones del Covid19 en el medio ambiente, entre otros temas.
Por último, invitan a las personas a “gustar” cine mexicano, que rompan los paradigmas, que las películas mexicanas van más allá de conocido como cine de ficheras o de narcos. “El cine mexicano tiene variedad, un discurso y un espíritu que vale la pena conocer”, subraya Emmanuel.
La clausura será el sábado 17 con una instalación audiovisual titulada “Lo que escucha el agua” con la composición musical de Aarón González y la instalación y visuales de Isaac Zambra y Emmanuel Tatto. Igual, exhibirán “Nos hicieron noche”, del director José Antonio Hernández, ganador del premio “Mejor documental” en el Festival de Cine de Colima. “La película habla sobre un fenómeno natural que es un ciclón y cómo quienes pierden sus casas tienen que volver a buscar sus espacios y sus creencias. José Antonio se emerge en este contexto siempre desde el respeto y la admiración”.
Mayor información en sus redes sociales: https://www.facebook.com/LibreCinemaFestival