Agresión contra Melissa, evidencia insensibilidad de autoridades judiciales

En vez de recibir apoyo, recibió un calvario legal al intentar denunciar a su pareja

Por Abraham Bote

La agresión en contra de la joven Melissa N. L. es uno de los tantos casos de revictimización que ocurren diariamente, pues además de peligrar su vida en manos de su pareja, se enfrentó a un sistema de justicia “insensible y burocrático”.

El pasado 29 de noviembre denunció que su novio –quien práctica jiu jitsu– L. A. G. R la intentó asfixiar en Playa del Carmen después de una discusión, mientras habían ido de paseo por unos días. 

Cuenta que esa noche le colocó una almohada sobre la cara para impedir que respire, lo que le dejó algunas marcas en el rostro. Tras varios minutos de forcejeo logró escapar luego de que el sujeto se quedó dormido en la habitación en donde estaban hospedados.

Al llegar a la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo a levantar una denuncia, el personal no le hizo ninguna valoración médica, sino que únicamente le tomaron unas fotografías de su rostro y cuerpo. 

A pesar de ello, logró conseguir una orden de protección en el vecino estado, y la acompañaron al hotel a recoger sus pertenencias, una hora después de que el sujeto había escapado. 

CALVARIO LEGAL

Tras regresar a Mérida, Melissa acudió a la Fiscalía General de Yucatán, a dar aviso, y pedir una orden de restricción en contra se su pareja, por lo sucedido. Sin embargo, le dijeron que ese no era el lugar indicado, que tenía que ir al Centro de Justicia para las Mujeres.

“Ni si quiera terminé de contar lo ocurrido, cuando una chica me pregunta… sí, pero ¿qué quieres denunciar?, lo que revela una falta de sensibilidad de parte del sistema, expresó. 

Seguidamente la misma persona “le corrigió” y le dijo que no se puede denunciar el mismo delito dos veces, pues ya lo había hecho en Quintana Roo. 

A lo que señaló que el sujeto vive en Mérida, y que teme por su vida, por lo que suplicó apoyo y orientación. 

“No sabes qué hacer, esperas una orientación, empatía, que te escuchen y que si te están viendo físicamente que te crean, aún viendo cicatrices, y que pudieran haber ido con el médico y pedir le informe, es nulo, no hay interés”, comenta. 

 

“Estás en estado de shock, con todas las preocupaciones, temes por tu vida, y no te dicen nada, ustedes son las personas capacitadas, esa es su función, pero no me orientas, no me brindas ayuda, y no me dices”, añadió. 

Entonces, al no poder proceder, pidió que por lo menos les dieran medidas de protección, de restricción,  pero le dijeron que esto le correspondía al Juzgado Familiar; no le explicaron las razones ni le ofrecieron algún abogado de oficio.  

“Irónicamente es un centro donde supuestamente está especializado en entender, empatizar y dar apoyo y ayuda a la mujer, y lo que menos recibí fue ayuda”; lamentó. 

Cansada de lo ocurrido, decidió salir del lugar y se dirigió a su casa. Al día siguiente, regresó, y con la ayuda de unos abogados fue orientada, algo que no ocurre con todas las mujeres.

“Entendí que sola no te hacen caso”, exclamó. 

ESPERA JUSTICIA

Tras ser orientada, y luego que el sujeto continuó enviando mensajes amenazantes, pudieron interponer otra denuncia en Yucatán en la carpeta de investigación con el folio G8/003164/2021. 

Actualmente, ella espera que haya justicia, que esta persona pague por lo que ha hecho y que se haga la investigación pertinente. Pero sobretodo, lamenta el martirio que tienen que vivir las mujeres al interior de las instituciones para lograr un castigo contra sus agresores.  

VIOLENCIA MACHISTA EN YUCATÁN

Del 2008 al 2021, se han documentado 79 feminicidios en Yucatán, de estos, 26 ocurrieron durante la actual administración del gobernador Mauricio Vila Dosal, según los colectivos, Frente por los Derechos de las Mujeres en Yucatán, y Yucatán Feminicida.

También se han registrado 6 mil 600 denuncias por violencia sexual. Estiman que de cada 100 casos de violencia de género, solo se registra el 1% de manera oficial. 

Los casos de violencia, parecen no ir a la baja, pues desde el 2018 el Estado ha otorgado 3 mil 456 órdenes de protección por violencia machista, de las cuales, el 1,499 han sido por situaciones de emergencia.